El Qhapaq Ñan

Piedra sobre piedra, caminar sobre 500 años de historia.

Hace quinientos años, los incas trazaron y construyeron un camino que unía puntos estratégicos a lo largo de Sudamérica. De esta obra de ingeniería, que aún es tema de estudio por su permanencia y conservación, 118 kilómetros pertenecen a la Argentina: los puntos son el Pucará de Aconquija, en Catamarca; el Volcán de Llullaillaco o Santa Rosa de Tastil, en Salta; el Complejo Arqueológico La Ciudadelita, en Tucumán; Puente del Inca, en Mendoza y las llamadas escaleras de Santa Ana, en Jujuy

En la Quebrada Grande de Jujuy, a 100 kilómetros de Humahuaca se extienden los valles de altura, que comprenden los pueblos de Caspalá, Santa Ana y Valle Colorado, de norte a sur, en dirección a las yungas jujeñas de Calilegua. A dos kilómetros de Santa Ana, se divisa el trazado del Qhapaq Ñan, que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 2014.

Si bien el trazado en esta zona llega hasta Valle Colorado (en los senderos a través de la selva, se ven algunas partes del camino), son pocos los kilómetros declarados patrimonio. Esto se debe a que muchas partes han sido alteradas por el hombre (construyendo caminos) o la naturaleza (la erosión del viento y las lluvias).

El tramo original, denominado «las escaleras», -porque se desciende 400 metros por escalones entre pircas-, comprende, por un lado un paisaje increíble donde la puna se une con la selva, y por otro la sorpresa de encontrar intacto el trazado. Muchas piedras están rodeadas de líquenes petrificados (esto habla de la edad del trazado), y a lo largo del tramo hay también maderas y troncos en el mismo estado.

A la localidad de Santa Ana, se accede transitando los 100 kilómetros que une Humahuaca con esta localidad por la ruta 73. Es un camino de ripio consolidado que no solo atraviesa el paisaje puneño y sus comunidades originarias, el trayecto muestra escenarios maravillosos como el Hornocal, la Laguna de Aparzo, el Abra del Zenta y el Abra Azul a 4550 msnm. Al llegar a Santa Ana, también está la opción de continuar los 20 kilómetros hacia Caspalá (subiendo y bajando cuestas y valles hasta los 3100 metros de altura) o girar hacia el sur en dirección a las yungas, visitando el Qhapaq Ñan.

Uno no puede dejar de pensar en los pies de quienes transitaron a pie, a lomo de burro, con mercancías, a merced de las inclemencias del tiempo, y en cómo se construyó este increíble camino cuyo trazado original comprendía 23 mil kilómetros a través de seis países: Argentina, Chile, Perú, Bolivia, Ecuador y Colombia.

En Argentina atraviesa las provincias de Jujuy, Salta, Catamarca, La Rioja, San Juan, Mendoza y Tucumán, 32 sitios arqueológicos y 18 comunidades asociadas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *